Un pensamiento ha aterrizado recientemente en mi cabeza. Apareció tras varias horas en la red social Twitter, mientras leía, con más o menos atención, los tuits de la gente. La ideología solo sirve para vender periódicos, para el resto de las cosas siempre pesa más el lado humano. Me podrán decir que mi afirmación es simple. Sí. Me gusta pensar cosas sencillas, intento evitar complicarme la vida.
Extendida mi argumentación, la ideología también sirve para vender abstracciones, programas electorales que no se van a cumplir. Después, mediante los medios de comunicación, te hacen posicionarte a la izquierda o a la derecha. Ser más conservador o más progresista. Todo una mentira. Nada existe.
Las personas (salvo en casos extremos de enfermedades mentales que provocan la carencia de empatía) siempre se guían por su lado humano. En la mesa siempre nos sentamos con personas con ideas completamente diferentes, de las que podemos aprender, a las que conviene escuchar. También ocurre al revés. Ellos escuchan, nosotros hablamos. La ideología no determina que una persona te caiga mal. Es su forma de actuar, para mí su falta de coherencia, la capacidad de decir una cosa y hacer otra. Pero nunca sus ideas (entendemos que no cabe la posibilidad de que una persona quiera bombardear un país o exterminar una raza).
La ideología es una forma de propaganda para hacer unas determinadas acciones políticas. Por desgracia, los medios de comunicación españoles se han convertido en el NO-DO del PPSOE, de las grandes multinacionales y de la estafa europea, solo adulan a los poderosos. Los medios tradicionales no van cargados de información para los ciudadanos, sino de panfletos políticos, reafirman las ideas de los partidos (aunque luego los propios políticos nunca las cumplan).
El último ejemplo es RTVE. La cadena de televisión ha realizado una purga similar a la de la desaparecida URSS ¡Stalin disimuló mejor la desapareción de sus enemigos!
Emite misa todas las semanas, a pesar de que el estado español es aconfesional, aunque Radio María (que carece de licencia) las difunda. Retransmite el sufrimiento de los animales. Las corridas de toros han vuelto, y en horario infantil.
Bertín Osborne, uno de los mayores jetas del país, tiene un programa que versa sobre asuntos sociales, cuando él carece del más mínimo conocimiento de la sociedad.La Casa Real también va a tener su propio espacio para promover el conocimiento de la labor de esta institución. Quizás en el capítulo de Urdangarin enseñen a robar, con el Rey será cómo engañar a tu mujer y el espacio de la Leti será un cambio radical, en el que te incitarán a operarte.
Luego extraña la crisis del periodismo. Los ciudadanos se han dado cuenta de que los medios de comunicación son meros portavoces, siempre al servicio de los poderosos. Siempre respetando las tradiciones y el status quo, y carentes de cualquier crítica al sistema.
Extendida mi argumentación, la ideología también sirve para vender abstracciones, programas electorales que no se van a cumplir. Después, mediante los medios de comunicación, te hacen posicionarte a la izquierda o a la derecha. Ser más conservador o más progresista. Todo una mentira. Nada existe.
La ideología es una forma de propaganda para hacer unas determinadas acciones políticas. Por desgracia, los medios de comunicación españoles se han convertido en el NO-DO del PPSOE, de las grandes multinacionales y de la estafa europea, solo adulan a los poderosos. Los medios tradicionales no van cargados de información para los ciudadanos, sino de panfletos políticos, reafirman las ideas de los partidos (aunque luego los propios políticos nunca las cumplan).
El último ejemplo es RTVE. La cadena de televisión ha realizado una purga similar a la de la desaparecida URSS ¡Stalin disimuló mejor la desapareción de sus enemigos!
Emite misa todas las semanas, a pesar de que el estado español es aconfesional, aunque Radio María (que carece de licencia) las difunda. Retransmite el sufrimiento de los animales. Las corridas de toros han vuelto, y en horario infantil.
Bertín Osborne, uno de los mayores jetas del país, tiene un programa que versa sobre asuntos sociales, cuando él carece del más mínimo conocimiento de la sociedad.La Casa Real también va a tener su propio espacio para promover el conocimiento de la labor de esta institución. Quizás en el capítulo de Urdangarin enseñen a robar, con el Rey será cómo engañar a tu mujer y el espacio de la Leti será un cambio radical, en el que te incitarán a operarte.
Luego extraña la crisis del periodismo. Los ciudadanos se han dado cuenta de que los medios de comunicación son meros portavoces, siempre al servicio de los poderosos. Siempre respetando las tradiciones y el status quo, y carentes de cualquier crítica al sistema.
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